ENSAYO DE CORRUPCIÓN 2

                   

                        “La Corrupción”
Para Hannah Arendt: La política requiere y representa, la vigencia, renovación y proyección de la polis como el espacio público provisto de libertad, igualdad, pluralidad, universalidad, no violencia, acción, comunicación e interacción de los seres humanos que son capaces de hablar y actuar continua y conjuntamente.
Siguiendo a la autora se puede hacer una lectura de la sociedad actual: repletas las injusticias, es imposible no notar como nuestros superiores son corruptos y abusan de nosotros con el fin de salir beneficiados en algún aspecto.
Como personas nosotros nos dejamos manipular a placer de ellos por lo que les facilitamos más las cosas y deciden seguir haciendo cosas que nos dificulta la convivencia en sociedad.
Estamos viviendo en un país donde constantemente se habla de corrupción en todos los ámbitos: en el gobierno, los sindicatos, las grandes empresas, etc.
No es secreto que gran parte de la sociedad nos roba por ejemplo, muchos policías saben en donde se encuentra la droga y no hacen nada porque son callados con plata que los mismos vendedores les dan, las enfermeras de los caps roban remedios y los venden, también está el caso del policía que hace servicio cobrando plata, sin ser notificados a hacer el mismo. Nuestros gobernantes prometen un cambio antes de subir al poder y cuando apenas van comenzando, es cuando deciden mostrarnos que es lo que en realidad pretenden.
Está muy dicho ya, pero necesitamos el cambio y lo sabemos, se ha hablado mucho y ha habido muchas quejas y la ciudadanía está ya muy cansada, sin embargo, mientras cada uno de nosotros en el día a día siga viviendo igual que como lo hemos hecho los últimos años, décadas, siglos “un cambio” no va a ser posible.
La corrupción también puede terminar poniendo en riesgo la vida e integridad física de los ciudadanos, por ejemplo, la baja calidad de los servicios médicos puede costarle la vida a un ciudadano enfermo, la construcción de edificios que no cumplen con los mínimos requisitos de seguridad, pueden costarle la vida a un ciudadano durante un temblor, las malas carreteras pueden ser muy peligrosas para los conductores y sus pasajeros, etc. Al saber de estos delitos empezamos a dudar del futuro del país, porque cada vez tenemos menos confianza en los gobernantes.
El famoso cambio que todos queremos y esperamos no va a llegar de la noche a la mañana, ni con una nueva administración, porque el cambio no se va a dar de arriba abajo, sino al revés. No olvidemos que en la democracia, el pueblo es el que tiene el poder, ejerzámoslo o permitamos que nos lo sigan quitando.
Deberíamos cambiar nuestra forma de pensar y actuar al respecto, y no dejarnos sobornar, por malas personas que solamente piensan en sí mismo, y ver en realidad lo que es bueno no solo para uno mismo sino para construir una sociedad mejor libre de corrupción.
Una buena elección hubiese sido hoy en día la de usar el pensamiento de Hannah Arendt ya que ella busca la igualdad, pluralidad, no violencia, comunicación entre los seres humanos que sean capaces de hablar y actuar conjuntamente.
Por eso como ciudadanos, jóvenes, si seguimos en la misma situación, si queremos seguir permitiendo los abusos del poder, está bien, pero hagámoslo conscientes y sin quejas que nada ganamos con hablar mal de nuestros superiores, si vivimos sentados de brazos cruzados, sin hacer nada.
ESCRITO POR AGUSTINA FIGUEROA.